En un giro inesperado que ha captado la atención de medios y ciudadanos por igual, el prominente político español Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular (PP), ha optado por un mutismo absoluto tras su reunión con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el pasado 13 de marzo de 2025. Lo que inicialmente parecía una oportunidad para clarificar la postura de la oposición frente a los desafíos geopolíticos de Europa se ha convertido en un enigma que alimenta especulaciones y titulares.
El telón de fondo
La reunión en el Palacio de la Moncloa tenía como objetivo discutir la posición de España ante la crítica situación internacional, marcada por la amenaza rusa en Ucrania y el repliegue anunciado de Estados Unidos en la defensa europea. Sánchez buscaba consenso en un momento delicado, pero Feijóo salió del encuentro sin ofrecer declaraciones detalladas, limitándose a un escueto comunicado en el que afirmó que “España no tiene un plan” y que el diálogo con el Gobierno es “difícil”. Desde entonces, el líder del PP ha evadido micrófonos y cámaras, dejando un vacío que sus propios correligionarios y adversarios intentan descifrar.
¿Por qué el silencio?
Fuentes cercanas al PP sugieren que este hermetismo podría ser una táctica deliberada. “Feijóo está midiendo el terreno; no quiere comprometerse hasta tener claro cómo evoluciona la postura de Sánchez y sus socios”, asegura un insider del partido. Sin embargo, otros lo interpretan como un signo de crisis interna: la falta de una posición unificada dentro del PP sobre temas clave como el gasto en defensa habría llevado al líder a optar por la cautela para evitar fisuras públicas. Mientras tanto, el PSOE no ha dudado en aprovechar la situación, con portavoces como Pilar Alegría insinuando que “el silencio del PP demuestra su incapacidad para liderar en tiempos de incertidumbre”.
Repercusiones en el tablero político
El mutismo de Feijóo ha generado reacciones encontradas. Por un lado, algunos analistas lo ven como un movimiento astuto que mantiene al PP en una posición de fuerza, evitando caer en las provocaciones del Gobierno. Por otro, ha dado munición a sus detractores, que lo acusan de falta de liderazgo en un momento en que Europa exige claridad. En las redes sociales, el hashtag #DóndeEstáFeijóo se ha vuelto viral, con memes y críticas que van desde lo humorístico hasta lo mordaz. Mientras tanto, el Gobierno sigue adelante con su agenda, preparando una comparecencia de Sánchez en el Congreso para abordar la crisis europea, lo que podría dejar al PP en una posición aún más incómoda si no rompe pronto su silencio.
¿Qué viene ahora?
El reloj sigue corriendo, y la presión sobre Feijóo aumenta. Con un Consejo Europeo extraordinario programado para esta semana y la opinión pública expectante, el líder del PP deberá decidir si su estrategia de bajo perfil le permite recuperar la iniciativa o si, por el contrario, lo condena a ser percibido como un espectador en un momento histórico. Por ahora, su silencio habla más alto que cualquier discurso, pero no está claro si eso jugará a su favor o en su contra.